Hablarán nuevas lenguas



Por Josué I. Hernández


Introducción
  • Algunos grupos religiosos nos dicen que poseen “el don de hablar en lenguas” y que en sus reuniones supuestamente “se derrama el Espíritu Santo”.
  • Preguntamos, ¿este fenómeno moderno es igual al “don de hablar en lenguas” mencionado en el Nuevo Testamento?

I. El Asunto
  • El asunto no es: ¿Hablaron en lenguas los cristianos del primer siglo? Todos estamos de acuerdo en que lo hicieron.
  • El asunto es: ¿Podemos hablar en lenguas de la misma manera?

II. ¿Emoción o revelación?
  • La palabra de Dios es verdad (Jn. 17:17). Es infalible e inmutable (1 Ped. 1:24,25). Da la respuesta a todas las necesidades espirituales del hombre (2 Tim. 3:16).
  • En cambio, los sentimientos y emociones deben, necesariamente, ser rechazados como totalmente inadecuados para determinar la voluntad de Dios (Jer. 10:23; Prov. 14:12).

III. Idiomas comunes
  • Las lenguas que hablaron los cristianos en el primer siglo eran idiomas comunes, “cada uno les oía hablar en su propia lengua”; y de nuevo, “les oímos hablar en nuestras lenguas las maravillas de Dios” (Hech. 2:6,11).
  • El Espíritu Santo otorgó a ciertas personas hablar en un idioma humano que jamás habían ni estudiado ni aprendido (1 Cor. 12:10).

IV. La evidencia bíblica
  • Las lenguas prometidas (Mar. 16:20) habrían de ser ejercidas “en todas partes”.
  • Esta capacidad fue recibida por la imposición de las manos de los apóstoles (cf. Hech. 8:18; 19:6; Rom. 1:11; 2 Tim. 1:6).
  • En Hechos 2, las palabras griegas “glosais” (lengua) y “dialectos” (idioma) se usan de modo intercambiable.
  • No hay evidencia bíblica de que la palabra “glosais” fuese una expresión verbal delirante o algún tipo de jerigonza (cf. 2 Ped. 3:16).
  • 1 Corintios 14:21 señala la profecía de Isaías (vea Is. 28:11), donde, claramente, se hace referencia a un idioma de otra nación.
  • Las lenguas de 1 Corintios 14 no podían ser jerigonzas o expresiones estáticas, porque este fenómeno ya era común en los cultos paganos de Corinto (cf. 1 Cor. 14:22).
  • Las lenguas debían hablarse bajo dos condiciones (1 Cor. 14:27,28), para mantener la decencia y el buen orden (1 Cor. 14:26).

V. El bautismo en el Espíritu Santo
  • No es un mandamiento sino una promesa (cf. Mat. 3:11,12; Mar. 9:1; Luc. 24:49).
  • No fue para todos los cristianos.
  • Prometido a los apóstoles (Hech. 1:2-5).
  • Cumplido en Hechos 2.
  • Hizo posible la revelación de la verdad (Jn. 14:26; 16:13) y su confirmación (Mar. 16:20; Heb. 2:3,4).
  • El caso de Cornelio y su casa (Hech. 10:44-48) fue un evento especial que jamás se repitió. Pedro recordó (cf. Hech. 10:45-48; 11:17,18).
  • En ambos casos el don de hablar en lenguas fue recibido directamente de Dios como una señal a los incrédulos (cf. 1 Cor. 14:22).

Conclusión
  • Los dones sobrenaturales fueron dados mediante la imposición de las manos de los apóstoles y no de otra manera.
  • Al morir los apóstoles y completarse la revelación de TODA la verdad ya no fue necesario la continuidad de tales dones (cf. Jn. 16:13; 1 Cor. 13:10).





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