Por Josué I. Hernández
Marcos 8:34-38
Introducción
- Muchos malos consejos: “Sé tú mismo, y persigue tus sueños”. “Sirve a Cristo a tu manera, Dios te entiende”.
- Jesús exige lo contrario, y habla de una “causa” (motivo, razón) por la cual negarnos.
- Los verdaderos discípulos viven negándose a sí mismos.
I. ¿Qué significa negarse a sí mismo?
- “olvidarse de uno mismo, perderse de vista a sí mismo y de los intereses propios” (Thayer).
- Considérense las acciones descritas e implicadas en nuestro texto.
- El Nuevo Testamento abunda con ilustraciones de aquellos que lo hicieron (ej. Mat. 6:33; Luc. 14:26-33; Gal. 2:20; Fil. 3:4-12).
II. ¿Por qué negarse a sí mismo?
- Es imposible ser discípulos de otra manera (Mar. 8:34).
- Es imposible salvar el alma de otra manera (Mar. 8:35-37).
- Porque Cristo lo hizo (Mar. 8:31). Él es nuestro ejemplo (1 Ped. 2:21), nuestro ícono (Rom. 8:29; 2 Cor. 3:18).
III. ¿Por qué algunos rehúsan negarse a sí mismos?
- Quieren salvar su vida en este mundo (Mar. 8:34).
- Se avergüenzan de Cristo y de sus palabras (Mar. 8:38).
- Son como Pedro, y piensan que el Señor se equivoca (Mar. 8:32,33).
Conclusión
- “Y llamando a la gente y a sus discípulos, les dijo: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame” (Mar. 8:34).
- ¿Es usted un verdadero discípulo de Cristo?
- ¿Quiere serlo?