Ningún pecado es demasiado grande



“Pero la gracia de nuestro Señor fue más abundante con la fe y el amor que es en Cristo Jesús” (1 Tim. 1:14). 


Por Josué I. Hernández


Introducción
  • No hay pecado demasiado grande que Dios no pueda perdonar. Sencillamente, ninguna persona es tan pecaminosa que no pueda ser redimida (1 Tim. 1:12-17).
  • Todo aquel que está dispuesto a ser perdonado, y obedece de corazón a las condiciones del perdón reveladas en el evangelio, será perdonado.

Jesús extendió su perdón a
  • Sus burladores (Mat. 27:44; Luc. 23:39-43).
  • Sus asesinos (Luc. 23:34; Hech. 2:36-41).
  • Sus negadores (Mat. 26:31; Mar. 14:66-72; 16:9-11,14).
  • Sus perseguidores (Hech. 9:1-6; 22:16).
  • A toda clase de pecadores (cf. Luc. 19:10; Hech. 2:21; 1 Tim. 1:15).

Jesús cambió vidas
  • Fanáticos políticos (cf. Luc. 6:15; Mar. 3:18).
  • Religiosos equivocados (cf. Hech. 6:7; 19:18).
  • Agnósticos e incrédulos (Hech. 17:32-34).
  • Hedonistas inmorales (1 Cor. 6:9-11).

Jesús no perdonará
  • Al que continúa pecando (Rom. 6:1,2).
  • Al que rehúsa creer (cf. Mar. 16:15,16; 1 Ped. 2:8).
  • Al que peca voluntariamente (Heb. 10:26,27).
  • Al que rehúsa arrepentirse (cf. Luc. 13:1-5; 24:47).
  • Al que rehúsa obedecer al evangelio (cf. 1 Ped. 4:17; 2 Tes. 1:8,9; Rom. 10:16).




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