Por Josué I. Hernández
Introducción
- Las ocasiones de celebración invitan al canto. Solemos cantar “cumpleaños feliz”.
- Los cristianos reaccionan cantando alabanzas cuando están alegres (Sant. 5:13).
- En la historia bíblica hubo cantos que celebraban la salvación por Dios (ej. Ex. 15:1-18; Jue. 5:1-31).
- Un día cantaremos en los cielos (Apoc. 14:1-3; 15:1-4).
- En los primeros dos capítulos de Lucas se registran varios himnos, que solemos reconocer como “los himnos de la infancia”, los cuales nos recuerdan la llegada del Mesías.
- El “Magnificat”.
- Alaba a Dios por lo que él ha hecho por ella.
- Alaba a Dios por lo que ha hecho por el mundo.
- Alaba a Dios por lo que ha hecho por Israel, al cumplir la promesa hecha a Abraham.
- El “pleroma” (v.54,55).
El canto de Zacarías (Luc. 1:67-79).
- El “Benedictus”.
- El “episcopos” con una visita redentora.
- Alaba a Dios por su redención, al cumplir la promesa hecha a David y a Abraham.
El canto de los ángeles (Luc. 2:13,14).
- El “Gloria in Excelsis Deo”.
- Huestes (gr. “stratia”), “Un término militar que denota una banda de soldados” (A. T. Robertson). Un destacamento de soldados (cf. Dan. 7:10; Mat. 26:53; Apoc. 5:11).
- Los ángeles se regocijaron en la creación (Job 38:7), sirvieron en la entrega de la ley mosaica (Deut. 33:2; Hech. 7:53; Gal. 3:19); y ahora, celebran la entrada de Dios en la vida humana.
- “Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz entre los hombres en quienes Él se complace” (Luc. 2:14; LBLA).
El canto de Simeón (Luc. 2:28-32).
- El “Nunc dimittis”.
- Había recibido la promesa de ver al Mesías (v.26).
- Movido por el Espíritu fue al templo, y tomó a Jesús en los brazos (v.2:27,28).
- La salvación preparada está encarnada.
- La luz que revelaría a los gentiles, y la gloria de Israel.
- Su profecía es mixta, indicando levantamiento y caída de muchos (v.34,35).
Conclusión
- Dios quiere que celebremos la fiesta (1 Cor. 5:8) y que cantemos (cf. Hech. 16:25; Ef. 5:19; Col. 3:16).
- ¿Lo estamos haciendo?