El mandamiento de apartarse



Por Josué I. Hernández


Introducción
  • Al final de su segunda epístola a los tesalonicenses, Pablo tomó tiempo para indicar un encargo grave: Apartarse de todo hermano que ande desordenadamente, y no conforme a la tradición recibida de los apóstoles (2 Tes. 3:6,14; cf. 2 Tes. 2:15).
  • La gravedad de este mandamiento se ve en que Pablo invoca el nombre de Jesús (2 Tes. 3:6; cf. 1 Cor. 1:10; 5:4).

Jesucristo lo exige
  • La gravedad del pecado ante los ojos del Señor (Heb. 1:9).
  • La iglesia debe a aborrecer lo malo de la misma manera (cf. Rom. 12:9; Ef. 5:11).

Los apóstoles lo enseñaron
  • “en todas las iglesias” (1 Cor. 4:17).
  • Las iglesias deben perseverar “en la doctrina de los apóstoles” (Hech. 2:42).
  • La disciplina en la iglesia local es parte del “la forma de las sanas palabras” (2 Tim. 1:13).

Para salvar almas.
  • El que peca voluntariamente está en perdición (Heb. 10:26-31).
  • Con la disciplina se procura avergonzarle (2 Tes. 3:14).
  • Toda la iglesia ha de participar en la sanción (1 Cor. 5:5)
  • Una iglesia que no disciplina a los pecadores desobedece a Cristo, y será leudada (cf. Apoc. 2:14-16; Gal. 5:9).

Para la buena reputación del Señor, su doctrina, y su iglesia.
  • El caso de Ananías y Safira, el primer caso de disciplina registrado (Hech. 5:1-10).
  • El resultado de la disciplina fue temor y aprecio, lo cual produjo avance para la verdad (Hech. 5:11,13).

Conclusión
  • La disciplina es un acto de amor, para salvar a un miembro impenitente (2 Tes. 3:15).
  • El mundo no tomará en serio el llamado del evangelio si la iglesia no trata adecuadamente con el pecado entre sus miembros.
  • Este mandamiento supone que existen condiciones que permiten obedecerlo. Hay compañerismo que retirar, es decir, hay asociación que desaparece al apartarnos del desordenado (cf. Gal. 6:1,2; 1 Tes. 5:14).
  • Cuando la iglesia se aparta de los desordenados, Dios es glorificado y Satanás es humillado (cf. Rom. 16:20).
  • Cuando la iglesia se niega a corregir el pecado y disciplinar a los infieles, la reputación de la iglesia sufrirá pérdida, y será leudada.
  • Cuando almas deciden vivir en santidad, ¿dónde pondrán su membresía? ¿En una iglesia desordenada que no corrige el pecado, o en una iglesia ordenada donde Dios es glorificado?