Por Josué I. Hernández
1 Corintios 3:1-4
Introducción
- No fue fácil predicar a los corintios, y luego, seguían siendo niños en Cristo.
- Esto sucede también hoy, cuando cristianos no crecen, no maduran.
Definiciones
- Carnal (gr. “sarkikos”), “pertinente a la carne” (Strong). “que tiene la naturaleza de la carne, es decir, bajo el control de los apetitos animales; gobernado por la mera naturaleza humana no por el Espíritu de Dios” (Thayer).
- Natural (gr. “psuchikos”), “la naturaleza sensual con su sujeción al apetito y la pasión” (Thayer). “Es el hombre inconverso que sigue solamente la sabiduría humana y rechaza la inspiración del Espíritu Santo. Basándose solamente en el razonamiento humano, no percibe las cosas del Espíritu” (B. H. Reeves).
- Espiritual (gr. “pneumatikos”), “no carnal” (Strong). “Los que son guiados por el Espíritu” (Vine). “Pablo acabó de decir (2:15) que el espiritual es hombre, o inspirado como él, o hermano que acepta la inspiración del Espíritu Santo y sigue la enseñanza inspirada” (B. H. Reeves).
La carnalidad ilustrada
- En la vida de cristianos inmaduros (1 Cor. 3:1,2; cf. Heb. 5:11-14).
- En las actitudes de los corintios (1 Cor. 3:3,4; cf. 1 Cor. 1:10-13).
- En las obras de la carne (cf. Gal. 5:19-21).
La carnalidad derrotada
- El consejo de Santiago (Sant. 1:21,22).
- El consejo de Pedro (1 Ped. 2:1,2).
- El consejo de Pablo (Col. 3:1-17; cf. Gal. 5:16-26).
Conclusión
- Si andamos en el Espíritu no seremos “vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros” (Gal. 5:25,26).
- Si andamos en el Espíritu exhibiremos espíritu de mansedumbre (Gal. 6:1).