La providencia de Dios


Por Josué I. Hernández

Introducción
Dios no ha obrado siempre mediante milagros, pero siempre gobierna el universo (tiene leyes):
  • Su obra es constante y cotidiana (Mat. 10:29-31; Hech. 17:28; Heb. 1:3; 1 Ped. 5:7)
  • Trascendiendo la libre voluntad humana (cf. Gen 50:20; Fil. 1:17; Flm. 15).
  • Sin que nos demos cuenta ahora, pero lo asumimos por la revelación bíblica (Est. 4:14)
Dos conceptos erróneos:
  • Dios creó el universo y luego nos abandonó.
  • Dios a menudo interviene suspendiendo las leyes naturales, vulnerando el libre albedrío y la responsabilidad personal, proporcionando prosperidad material y placer.

I. Providencia definida
Providencia divina: “Cuidado amoroso y previsor que Dios tiene para con sus criaturas. La providencia de Dios sostiene y gobierna todo lo creado. Su operación es tan extensa como el Universo y tan incesante como el curso del tiempo...” (Vila-Escuain)
  • El término “providencia” se deriva del latín “providentia”, que denota la “previsión”, ver de antemano, una visión de futuro.
  • La divina providencia tiene que ver con: 1) El mantenimiento funcional del equilibrio natural del mundo.  2) El cumplimiento de los propósitos divinos en los asuntos de los hombres.  3) El cuidado y previsión divino en las vidas de aquellos que tienen hambre y sed de justicia.
Dios ha creado este universo con tal precisión, y teniendo tal control de él, que puede ver de antemano todas las cosas, dirigiendo y obrando según sus santos y divinos propósitos, sin anular la libre voluntad humana.

En nuestra reacción luchando contra el pentecostalismo, ¿hemos llegado al otro extremo? ¿Hemos perdido la fe en el control poderoso de Dios?


II. Providencia, milagros y destino
La obra providencial de Dios no siempre usó de milagros.
  • En la historia bíblica los milagros ocurrieron en momentos específicos (eventuales).
  • La providencia de Dios no deja de obrar (constante).
  • La obra providencial de Dios no es “el destino”.
  • El destino es ciego, Dios lo ve todo.
  • El destino es impersonal, Dios es personal.
  • La suerte, o fortuna, no tiene voz, Dios habla, se revela.

Providencia y libre albedrío
  • La acción humana tiene poder causal, es decir, provoca acontecimientos.
  • Dios trasciende el poder causal humano, no queda subordinado a él (cf. Hech. 2:23; 4:27,28).

III. Providencia, ejemplos
  • Responder oraciones (Mat. 7:7,8,11)
  • Ejecutar al rey Acab (1 Rey. 22:23-35)
  • Respuesta a la oración de David (2 Sam. 15:30,31; 17:14)
  • Salvar a Pablo de la muerte (Hech. 23:16)

Conclusión
  • No sabemos todo lo que quisiéramos, sólo lo suficiente. Pero, nuevamente, ¿qué clase de persona somos con lo que sabemos?
  • Leer Romanos 11:33-36


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