El individuo y la iglesia


Por Josué I. Hernández


Introducción
  • Una idea errónea es la de pensar que el individuo es la iglesia, y la iglesia el individuo.
  • Otra idea errónea es la de creer que los miembros de por sí son la iglesia, y la iglesia son los miembros.
  • Ciertamente, la segunda idea está más cerca de la verdad, sin embargo, requiere de la precisión que la revelación bíblica permite.
  • Quienes no perciben la diferencia entre individuos e iglesia, promueven todo tipo de actividades sociales financiadas con el dinero de la iglesia local.

I. Hay que conservar la diferencia

  • Si todos los miembros de la iglesia local van a un restaurante, y comen juntos, o van a un picnic y juegan futbol, esta acción no es de la iglesia local. Simplemente, es una acción de los individuos.
  • Si en determinado momento, están todos los miembros de la iglesia a la orilla del río, disfrutando unas hamburguesas, ellos no son la iglesia comiendo hamburguesa.
  • Hermanos equivocados dicen, “si la iglesia puede comer junto al río, entonces puede financiar un comedor en el edificio de reuniones”. Semejantes expresiones demuestran falta de comprensión respecto a la naturaleza y obra de la iglesia local.

II. La iglesia local
  • Una definición demasiado general, usada para la iglesia local es, “el grupo de cristianos de una localidad”. La iglesia local es mucho más que eso. La iglesia local es una institución formada por santos en un acuerdo de funcionamiento conforme a la palabra de Cristo (cf. Hech. 2:42).
  • La iglesia local tiene una función y está organizada bajo la ley de Cristo para ello (cf. 1 Tim. 3:15). Es “iglesia de Cristo” por su funcionamiento.
  • Cuando el término iglesia se usa en el sentido local, siempre se usa de una de dos maneras: 1) Los santos de Dios de una localidad, organizados entre sí, y en relación de salvación con Dios (ej. 1 Cor. 1:2). 2) Los santos de Dios de una localidad, organizados entre sí, y haciendo la obra de Dios (ej. 1 Cor. 11:18).
  • El sustantivo “iglesia” nunca se usa para cristianos comiendo o jugando futbol. Por lo tanto, no debemos usar la palabra “iglesia” en relación con actividades sociales propias de los individuos. ¡La iglesia no toma café, ni juega futbol!
  • La iglesia local es una organización singular, colectiva, un conjunto, que podemos ilustrar pensando en una cadena. Los “eslabones de una cadena” no comprenden “una cadena” hasta que mantienen una “relación de funcionamiento” particular. Esta es la naturaleza misma del sustantivo singular, colectivo, “iglesia”. La iglesia local se compone de varios miembros que funcionan juntos de cierta manera según Cristo les manda.
  • Cuando los miembros de la iglesia se reúnen a tomar café, o jugar futbol, esto no significa que se ha reunido la iglesia, porque tales cosas no son del funcionamiento distintivo que Dios ordenó para la iglesia local.
  • Lo que los individuos hacen, no lo hace la iglesia.

III. La responsabilidad del individuo no es de la iglesia local
  • El individuo cristiano debe cumplir sus responsabilidades sin cargarlas a la iglesia local. Los hijos, no la iglesia local, deben cuidar de sus padres. Honra a tu padre y a tu madre no es mandamiento a la iglesia local, sino al individuo (Ef. 6:2). La iglesia local no debe ser cargada con la responsabilidad de los individuos (1 Tim. 5:16).
  • Los individuos juegan y celebran sanamente, en actividades sociales de recreación, pero la iglesia local no funciona así.
  • Las responsabilidades del individuo no son transferibles a la iglesia local. Sencillamente, hay responsabilidades propias del individuo que la iglesia local no puede cumplir (ej. Mat. 18:15-17).

Conclusión
  • Dios ha dado a los cristianos responsabilidades individuales para cumplir. A su vez, la iglesia local tiene sus propias responsabilidades.
  • Es importante que tanto el individuo cristiano como la iglesia local entiendan sus responsabilidades para obedecer a Dios en sus propios deberes.
  • No permitamos que la iglesia cargue con deberes, involucrándose en actividades sociales que no le corresponden, y que la distraen de su misión y frustran su trabajo.




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