Por Josué I. Hernández
Introducción
- La tesorería de una iglesia local está autorizada (cf. Hech. 4:32-35; 1 Cor. 16:1-3; 2 Cor. 11:8,9).
- No podemos usar el dinero en tesorería para cualquier cosa, por ejemplo, una llamada “buena obra” sin precedente bíblico, o una idea considerada “medio” o “método” sin precedente bíblico.
- Debido a que la iglesia pertenece a Cristo (Hech. 20:28), el dinero en tesorería pertenece a Cristo, y el uso del dinero en tesorería debe estar autorizado por Cristo.
- Según leemos en el Nuevo Testamento, la iglesia local debe usar de su tesorería para:
I. Evangelización
- La necesidad universal de salvación (Rom. 3:9,10,23; Ef. 2:1,12)
- El evangelio es el poder de Dios para salvación (Rom. 1:16,17; Ef. 1:13).
- La iglesia local es “columna y sostén de la verdad” (1 Tim. 3:15, LBLA). Es la agencia de Dios para la evangelización. La institución, la organización, evangelística, la cual sostiene a sus propios predicadores (1 Cor. 9:1-18), y puede sostener a predicadores en otro lugar (2 Cor. 11:8,9; Fil. 1:3-5; 4:15,16).
- Diferentes “recursos de ejecución”. La manera en que vamos, sin cambiar lo que predicamos (cf. Mat. 28:19; Mar. 16:15; Hech. 8:4; 1 Tes. 1:8). La manera en que predicamos, sin traspasar el patrón del Nuevo Testamento (cf. 2 Tim. 1:13; 1 Cor. 10:23). La iglesia no puede crear, o sostener, una institución mediante la cual evangelizar.
II. Edificación y Adoración
- La necesidad de adorar en iglesia: 1) La enseñanza (cf. Hech. 2:42; 20:7; 1 Cor. 14:26). 2) La oración (cf. Hech. 2:42; 1 Tes. 5:17,18; Col. 4:2). 3) La cena del Señor (cf. Hech. 2:42; 1 Cor. 10:16; 11:23-26). 4) La colecta dominical (cf. 1 Cor. 16:1; 2 Cor. 9:6,7). 5) El canto (cf. Ef. 5:19; Col. 3:16).
- La necesidad de crecimiento en los cristianos (cf. Rom. 8:29; 12:2; Ef. 4:11-16; 2 Ped. 1:4-13; 3:18).
- La iglesia local es “columna y baluarte de la verdad” (1 Tim. 3:15). Es la organización de Dios para la edificación de los santos. Es suficiente para que se logre el resultado esperado (Ef. 4:11,12). Ella edifica con la verdad (cf. Ef. 4:15; Hech. 20:32).
- La edificación y adoración demandan congregarse (cf. 1 Cor. 11:18; 14:26; Heb. 10:25). Se requiere un lugar y horario (cf. Hech. 2:46; 5:12; 20:7,8; Heb. 10:25). Se requiere el acuerdo y la acción como cuerpo (1 Cor. 12:27). Se requiere de todos los recursos de ejecución posibles.
IV. Benevolencia Limitada
- El patrón del Nuevo Testamento para realizar este ministerio. Individualmente (Hech. 9:36-43; Gal. 6:10; Sant. 1:27). Congregacionalmente (Hech. 11:29,30; Rom. 15:26; 1 Cor. 16:1-3), primeramente, a los santos locales (Hech. 4:34,35), y a los santos de otros lugares (Hech. 11:29,30).
- Recordar las dos tesorerías (cf. 1 Tim. 5:16). 1) El bolsillo del individuo (Ef. 4:28; 1 Tes. 4:11,12; 2 Tes. 3:10-12). 2) El tesoro de la congregación (1 Cor. 16:2,3).
- Características de la benevolencia congregacional: 1) Es parte de las responsabilidades de la iglesia local. 2) No es subsidio mensual, regular y de plazo indefinido, sino una ayuda en una emergencia en que predomina la necesidad del santo, y que se extiende hasta que se supla lo que falta (cf. 2 Cor. 9:12). 3) Es una expresión de comunión (2 Cor. 9:13). 4) Está limitada a los santos (cf. Hech. 11:28-30; Rom. 15:26; 1 Cor. 16:1; 2 Cor. 8:4; 9:1,12). No hay autorización para extender la benevolencia a los no-santos también.
Conclusión
- Según aprendemos en el Nuevo Testamento, el dinero de la iglesia local solo puede dirigirse a santos, ya sea un santo necesitado, o un predicador de la palabra. No hay otro receptor autorizado.
- La iglesia local usa su dinero en la evangelización, edificación, adoración y benevolencia limitada. Pagando todo recurso que permite que haga su obra, sin cumplir la responsabilidad del individuo.